lunes, julio 21

De cruceros y otras cosas

Noticias del último trip: las islas del Pacífico Bajacaliforniano en un buque de la marina. El propósito: contar y determinar estructura poblacional de los diferentes tipos de pinípedos (llaménse focas, lobos marinos y elefantes marinos) en las islas Guadalupe, Cedros, San Jerónimo y San Martín, como parte de mi trabajo de tesis. Comí comida del ejército, dormí sobre el duro suelo de la cubierta y madrugé por 6 días consecutivos PERO, ví a esos bichos en su medio natural, aprendí a identificar crías, me divertí y aprendí de las personas con las que fuí, no me marié, dormí con el aire fresco del Pacífico y ví ballenas, delfines, peces luna y medusas enormes, así que supongo que fue todo un éxito. Les dejo unas pics, les debere el video de los delfines, espero poder subirlo pronto.

Sobre El libro del silencio

Acabo de terminar este libro, que aunque no es la clase de lecturas que acostumbro, me pareció, en general, interesante. Les comparto algunos párrafos que me agradaron en sobremanera.

Literatura y mito existen porque existe un silencio que en realidad es antipalabra. Si todo hubiera sido dicho o todo resultara fácilmente decible, moraríamos en la era de otro tipo de silencio, el silencio pleno donde la palabra no necesitaría ser contrarrestada porque sería superflua (...) Cuando la antipalabra de una vida individual se quiebra surge la literatura; cuando la que se agrieta es la antipalabra de un grupo aparece el mito: literatura y mito son las maneras de decir lo que no puede ser dicho de otro modo, son las formas que hemos creado para contornear el vacío, para sediarlo.

¿De qué palabras se rodea cada persona? ¿Cuáles son esas palabras y cómo las acomoda en una sencuencia? (...) ...las palabras donde se aloja cada quien deben ser muy concretas, tibias, húmedas: un lugar, una fecha, un objeto, un nombre.
(...)
Tendría que empezar de nuevo.
¿De qué historias se rodea una persona? Historias, ractifico ahora, porque una palabra después de otra, eslabonadas en una sencuencia particular, resultan en una frase y la frase es el camino a la narración.
¿Con qué historias entonces, se viste cada persona como si se enfundara una segunda piel sobre la piel? ¿Historias recientes o antiguas historias que solía denominárseles "tragedia"?

El lenguaje acumula una memoria fatal que ni siquiera se reconoce como memoria. Olvidar es una de las maneras de ser libre, un arduo y prolongado trabajo que en ocasiones desemboca en la locura o el suicidio. Renunciar a las historias que son nuestra genealogía, nuestra ascencia.

Ricardo Chávez Castañeda. 2005. El libro del silencio. Editorial Alfaguara.

martes, julio 8

...

Voss:

Gracias por el viaje y los paseos; Por las 2 tardes en La Paz: por el cariño en tu casa y por conocer a tu familia, me hiciste sentir muy halagada. Sé que ambos esperamos regresar juntos algún día. Yo deseo que así sea (L)

lunes, julio 7

The lucky girl

Finalmente lo he conseguido. Hice largos viajes pero con ninguno lograba llegar. Todos iban, conocían y regresaban felices, pero yo no podía ir. Crucé un tercio del mundo pero seguía sin conocerlo. Al fin, el compañero y el momento perfecto para hacer el tan esperado viaje llegó…


Podría escribir en este momento las palabras exactas que dirían porqué disfruto tanto viajar. Pero me es difícil describir los deseos de hacerlo o por qué quisiera conocer un lugar en particular. Lo intentaré.

Creo que deseo hacer viajes porque estoy consciente de la enorme cantidad de mundos que hay. En todos los aspectos. Desde la historia de cómo se formó un pequeño pueblo a 4 horas de la carretera más cercana, hasta el ambiente social que hay en una familia numerosa y lo que cenan.

Un viaje te saca de la rutina, no sólo de la escuela o el trabajo (para eso basta con estar de vacaciones y quedarte en casa), si no de las calles, la gente y los lugares que frecuentas. Siempre he estado a favor del cambio y la varieda´ (pue´). Los ambientes nuevos me emocionan y generalmente terminan hipnotizándome.

La parte de la península que faltaba. El lugar donde naciste y al que esperas regresar algún día. Hogar adoptivo de tantos. Finis terra.

Diez estupendos días de un viaje que había deseado hacer desde hacía mucho tiempo.

La Paz es una ciudad pequeña y tranquila con un mar y un malecón digno de presumir en el mundo. Con un clima que se compone por las tardes y una roca que se ha tenido que levantar 2 veces.

Todos Santos es casi exactamente cómo me lo imaginaba, sólo que mejor y con el mar del lado contrario (me nortié). Eso de estirarte un poco y alcanzar un mango es algo insólito para alguien que viene de una ciudad que está en un hoyo en medio del desierto. Confieso que hasta hace no tanto tiempo (considerando que conozco a Voss desde hace casi 5 años), supe que el Hotel California estaba justo en Todos Santos y no al lado de la carretera, medio abandonado pero convertido en una galería (mi imaginación vuela!). Y me encanta la idea de que estén tratando de recuperar el aspecto que tenía el pueblo en la década de los 50´s, cuando se vivía de los cañaverales que había.. Espero que lo consigan y que pueda ir a verlo con mis propios ojos.

Los Cabos es la típica ciudad turística hecha por mexicanos para gringos. Típico escenario donde hay un hotel elegantísimo y un centro comercial de marcas prestigiosas, pero al lado, puestos de vendedores ambulantes procedentes del sur del país. Pero el puerto y la playa son dignos de admirarse. El puerto limpio y el viaje a ver el arco y la última piedra de mi amada península, es algo que definitivamente vale el calor, el tráfico y el turisteo entre comercios que venden todo excesivamente caro. Ni se diga de que abordes, junto con el galán, el barco que va al arco por las tardes y termina el recorrido con un atardecer inigualable como los de Baja Sur.

En fin. Compruébalo por ti mismo.